Mes de la Herencia Africana en Honduras, 223 años de presencia garifuna en el país; sin duda grande el logro y tremenda visibilidad la que ha aportado el decreto de Ley 330-2002 donde se declara a abril como un mes de celebración por los aportes que la comunidad afro ha brindado al país en lo social - económico, político, cultural entre otros.
Destaco que a pesar de las menciones y honores que la cultura negra recibe en dicha conmemoración, a Honduras le ha quedado grande el zapato en la administración, gestión, cuido, atención y mejoramiento de las diferentes comunidades negras que la habitan; pues aún hay temas de envergadura que vale la pena señalar, como la tenencia de las tierra, el acceso a la educación y salud, el trato justo basado en los derechos humanos pertinentes a cada individuo, el desarrollo económico y social, y la violencia e impunidad a la que han sido sometidos miembros de las comunidades afrohondureñas.
Es menester realizar cambios y acciones que nos conduzcan a una sociedad más justa y mejor equipada para afrontar los tremendos desafíos del mundo moderno, con amenazas actuales como el covid19 y la crisis en la economía venidera pos pandemia, que sin duda afectará a nuestra gente; ¿cómo cuidamos del colectivo? ¿qué alianzas se deben realizar? ¿cuál es el plan interno de los dirigentes comunales y líderes afro en cada región? ¿cómo nos vemos de aquí al 2030, de igual forma, desmejorados o enrutados al mejoramiento de la calidad de vida de la gente negra?
Tenemos que hablarlo primero porque la verdad nos liberta, también nos empodera y permite ordenar los fundamentos, que se han venido construyendo por nuestros antecesores, lo cual no es nada minúsculo; pero hay mucho más que abonar para juntos lograr salir adelante ¿podemos? claro que sí.
Surcando el camino, quitando espinos, forjamos mejores destinos.
Hace alusión del andar de un pueblo que por su aporte, más, allá de la cultura viva; analiza aspectos álgidos sobre la tenencia de la tierra, la falta de un plan interno colectivo comunitario, desatención total por parte del estado sumado los retos y desafíos que estamos obligados a enfrentar como pueblo proyectando avances para el año 2030, es decir, apuntala y define grandes aspectos que deben ser observados de forma conjunta e integral; gracias Wendy Melissa Pérez por tu acertada y analítica entrega disponible en la mesa comunitaria de los negros hondureños comprometidos.
Importante reconocer desde el punto del Matriarcado que aún queda mucho por avanzar en lo
colectivo. Muy buen artículo.